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25 de agosto ALIMENTOS

El Rol del Tecnólogo en Alimentos: Un Pilar en la Seguridad y Calidad Alimentaria

¿Qué es un Tecnólogo en Alimentos?

 El Tecnólogo en Alimentos es un profesional clave en la industria alimentaria, cuya labor es asegurar la calidad, seguridad, y valor nutricional de los productos que consumimos. Aplica principios científicos y tecnológicos para el desarrollo, procesamiento, conservación, y distribución de alimentos, garantizando que estos cumplan con las normativas y estándares de calidad.

Funciones y Responsabilidades

Las principales funciones del Tecnólogo en Alimentos incluyen:

  • Desarrollo de Productos: Participa en la creación de nuevos productos alimenticios, desde la selección de ingredientes hasta la formulación y prueba de recetas. Asegura que los nuevos productos sean seguros, de alta calidad y cumplan con las expectativas del consumidor.
  • Control de Calidad: Supervisa cada etapa del proceso de producción para garantizar que los alimentos cumplan con los estándares de seguridad y calidad, la nutrición, el sabor, la textura, la apariencia y la vida útil de los productos alimenticios también es una tarea clave. Realiza pruebas microbiológicas, fisicoquímicas y sensoriales. Además, deben analizar e interpretar encuestas a consumidores o tendencias del mercado.
  • Gestión de la Seguridad Alimentaria: Implementa y monitorea sistemas de gestión de la seguridad alimentaria, como HACCP (Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control), para prevenir riesgos de contaminación y garantizar productos seguros para el consumo.
  • Optimización de Procesos: Trabaja en la mejora de procesos de fabricación para aumentar la eficiencia, reducir costos y minimizar el impacto ambiental. Los tecnólogos de alimentos también deben preparar informes, propuestas, recomendaciones o normas para productos o procesos alimentarios.
  • Regulación y Cumplimiento Normativo: Asegura que los productos alimenticios cumplan con la legislación vigente y las normativas internacionales. Esto incluye etiquetado, contenido nutricional, y cumplimiento de regulaciones de seguridad. Colaborar y comunicarse con otros profesionales de la alimentación también es importante, además de estar al día de los últimos avances científicos y tecnológicos del sector.

Riesgos que controlan los tecnólogos de alimentos

Los tecnólogos de alimentos, en el desarrollo de sus funciones, llevan a cabo el control y freno de numerosos riesgos para nuestra salud. Entre ellos, encontramos los siguientes. Por un lado, los riesgos físicos. Estos hacen referencia a materiales o sustancias extrañas que pueda contener una alimentación y que sean dañinos. Por ejemplo, que un alimento contenga metales, plásticos, vidrios, espinas, etc.

Por otro lado, los riesgos químicos son otra de las preocupaciones de los tecnólogos de alimentos. En estos, hacemos referencia a aditivos alimentarios que sean perjudiciales para nuestra salud. Aunque existen muchos aditivos cuyo uso y utilización está aprobado, no ocurre en todos ellos. Dentro de los aditivos alimentarios, nos referimos a sustancias como las siguientes:

  • Colorantes
  • Edulcorantes
  • Conservantes
  • Aromatizantes
  • Emulsionantes
  • Estabilizantes
  • Pesticidas y herbicidas
  • Antibióticos

Por último, los tecnólogos de alimentos se centran en los riesgos microbiológicos. Como su nombre indica, hace referencia a la presencia de algunas bacterias, hongos o virus que contengan los alimentos y que puedan causar daños en nuestra salud. En concreto, pueden causar toxiinfecciones alimentarias. Una de las más conocidas es la Salmonela.

Un día en la vida de un tecnólogo de alimentos

Un día típico podría involucrar una mezcla de entornos de trabajo: investigar en una oficina, probar en un laboratorio o desarrollar y ajustar recetas en una cocina.   La clave es poder modificar los procesos de cocción estándar que puede usar en casa para producir una comida pequeña para consumo inmediato o a corto plazo, a un producto adaptado para que dure más tiempo sin comprometer el sabor y la textura, y que se pueda producir. a gran escala.

Como tecnólogo de alimentos, se espera que supervise y mejore las medidas de higiene y seguridad, desde la etapa de la materia prima hasta el producto envasado terminado; elegir materias primas y participar en cómo se empaqueta y etiqueta un producto.

Además, tener en cuenta los presupuestos para hacer que un producto sea rentable y maximizar los márgenes de beneficio; y realizar pruebas en nuevos productos para garantizar que estén presentes los valores nutricionales correctos y que se logre el sabor óptimo.  

También podría participar en garantizar que se utilice la maquinaria adecuada para obtener resultados óptimos.

Habilidades y Educación

Un Tecnólogo en Alimentos requiere una formación en licenciatura en ciencias de los alimentos, tecnología de los alimentos, ingeniería de los alimentos, y biotecnología o un campo relacionado, complementada con conocimientos en normativa alimentaria. Además, debe tener habilidades en:

  • Resolución de problemas: Capacidad para identificar y resolver problemas técnicos en la producción de alimentos.
  • Creatividad e innovación: son necesarias para desarrollar productos o procesos alimentarios nuevos o mejorados que satisfagan las necesidades y expectativas de los consumidores y clientes.
  • Atención al detalle: Minuciosidad en el control de calidad y en la aplicación de normativas.
  • Conocimientos técnicos e informáticos:  para utilizar diversos equipos, herramientas, software y bases de datos para el análisis, el procesamiento y la documentación de alimentos.
  • Comunicación efectiva: Habilidad para transmitir información técnica de manera clara a diferentes audiencias, desde operarios hasta directivos.
  • Trabajo en equipo: Colaboración con otros profesionales, como ingenieros, nutricionistas y especialistas en marketing.

Retos y Oportunidades

 El campo de la tecnología de alimentos presenta diversos desafíos, como la creciente demanda de alimentos saludables y sostenibles, la necesidad de innovar en procesos de producción y conservación, y la adaptación a nuevas normativas internacionales. Sin embargo, también ofrece amplias oportunidades, especialmente en la investigación y desarrollo de nuevos productos, la gestión de calidad, y la sostenibilidad en la producción alimentaria.

Campos de Trabajo

Además de las plantas de producción de alimentos, un Tecnólogo en Alimentos puede desempeñarse en:

Investigación y Desarrollo: Trabajando en laboratorios para desarrollar nuevos productos o mejorar los existentes.

Consultoría: Asesorando a empresas sobre normativas, seguridad alimentaria y optimización de procesos.

Educación y Formación: Impartiendo conocimientos en universidades o centros de formación técnica.

Regulación y Auditoría: Trabajando para agencias gubernamentales en la supervisión y control de la industria alimentaria.

Conclusión

El Tecnólogo en Alimentos es esencial para garantizar que los alimentos que llegan a nuestras mesas sean seguros, nutritivos y de alta calidad. En un mundo donde la seguridad alimentaria y la innovación son cada vez más relevantes, este profesional juega un papel crucial en la sostenibilidad y eficiencia de la industria alimentaria.