LATAS DAÑADAS, ¿Consumo seguro?
Una medida de prevención básica es descartar alimentos enlatados que estén abultados o conservas con mal olor
Las latas de conservas son envases que además de proteger el alimento también alargan su conservación. Para conseguirlo siguen un riguroso proceso que garantiza la hermeticidad, el sellado al vacío y la esterilización. Sin olvidar las altas temperaturas a las que debe ser cocinado el alimento.
Se trata de una serie de requisitos que convierten a las latas de conservas en envases seguros.
Pero en algunas ocasiones esas óptimas condiciones se pueden ver alteradas, bien a causa de fallos en el proceso de envasado o bien porque la lata muestre golpes, abolladuras o abombamientos. Como consumidor ¿qué se debe hacer al encontrar una lata en ese estado? ¿Resulta su consumo peligroso para la salud?
En una lata se pueden encontrar varios tipos de desperfectos:
- Abolladura o golpe
- Oxidación
- Abombamiento
- Cierres defectuosos
Alimentos enlatados abultados o conservas con mal olor, pueden causar botulismo;
De todos los riesgos para la salud que puede conllevar una lata abollada o abombada el más peligroso es que el alimento esté contaminado con toxina botulínica, causante del botulismo, una enfermedad poco frecuente pero muy grave.
Todo se precipita cuando la bacteria Clostridium botulinum produce esporas termorresistentes que en ausencia de oxígeno germinan, crecen y excretan toxinas.
La bacteria en sí no es dañina, sino que es un entorno con falta de oxígeno como las conservas de alimentos el que propicia que las esporas de la bacteria liberen la toxina.
Esta situación suele generar gases en el interior del envase que acaban provocando el abombamiento y la deformación de la lata.
El botulismo, una enfermedad rara y grave por su potencial mortal es causada por la bacteria Clostridium botulinum. Con el tratamiento oportuno se reduce significativamente el riesgo de muerte.
Hay tres clases principales de botulismo:
•Transmitido por los alimentos (enlatados o conservas mal procesadas): esto ocurre cuando una persona ingiere la toxina producida por la bacteria y presenta síntomas de la enfermedad desde unas horas después de haber ingerido el alimento contaminado, hasta unos días después.
•Infantil: cuando un bebé ingiere las esporas o a la bacteria y éstas se multiplican en el tubo digestivo.
•A través de heridas: cuando éstas llegan a contaminarse por la bacteria y secreta la toxina.
Los síntomas de botulismo se pueden presentar de forma súbita y son boca seca, visión doble, caída de los párpados e incapacidad para enfocar los objetos cercarnos, náuseas, vómito, dolor abdominal y diarrea. Las personas afectadas presentan dificultad para hablar y deglutir alimentos líquidos o sólidos.
¿Cómo prevenirlos?
Las latas abolladas permiten que las bacterias peligrosas ingresen en los alimentos.
Preste atención a lo siguiente:
• Abolladuras en las uniones superiores e inferiores
• Abolladuras en las uniones laterales
• Perforaciones u orificios
• Abolladuras importantes
• Abolladuras con bordes filosos
• Latas abultadas o hinchadas
• Latas muy oxidadas
Qué debe hacer:
• Separe las latas abolladas de las latas en buenas condiciones.
• Etiquete la lata abollada o la zona de almacenamiento con la
leyenda “No usar”.
• Devuelva la lata al proveedor o deséchela.