El viaje hacia la sostenibilidad

Hace más de 50 años, el mundo fue testigo de la introducción del vino en caja, una innovación que revolucionó la forma en que se empaquetaban y distribuían las bebidas. Esta nueva modalidad ganó popularidad no solo por su precio más accesible, sino también por su impacto ambiental positivo.

El vino en caja, al ser reciclable y más ligero, resultó ser una opción más sostenible en comparación con las botellas de vidrio tradicionales. Este cambio no solo benefició al medio ambiente, sino que también simplificó el proceso de servir y almacenar el vino, gracias a la incorporación de un grifo integrado en la bolsa interna.

Ahora, Absolut Vodka está tomando una medida similar al explorar la posibilidad de reemplazar sus icónicas botellas de vidrio con botellas de papel. Esta iniciativa forma parte de un proyecto piloto en colaboración con Paboco, una empresa dedicada al desarrollo de botellas de papel innovadoras y sostenibles, con el objetivo de reducir el impacto ambiental de su embalaje.

Estas nuevas botellas están fabricadas con un 57% de fibras de madera certificadas por el Forest Stewardship Council, lo que las hace altamente sostenibles y respetuosas con el medio ambiente. Además, para evitar filtraciones, las botellas cuentan con una barrera de humedad integrada fabricada con plástico reciclado.

Sostenibilidad embotellada de Absolut Vodka

La colaboración con Paboco, una empresa especializada en botellas de papel, demuestra el compromiso de sostenibilidad de Absolut Vodka con la innovación sostenible. Paboco ha estado liderando el camino en la creación de botellas de papel totalmente biodegradables y reciclables, en asociación con otras grandes empresas como L’Oréal, The Coca-Cola Company y Procter & Gamble. Este enfoque colaborativo en la búsqueda de soluciones de embalaje más inteligentes y sostenibles está impulsando un cambio significativo en la industria.

La experiencia previa de Paboco en el empaquetado de bebidas alcohólicas, como el exitoso caso de la empresa cervecera Carlsberg con su botella de fibra, respalda la viabilidad de este enfoque para Absolut Vodka. La botella de fibra de Carlsberg, hecha de un revestimiento de polímero PEF a base de plantas, ha demostrado ser compatible con los sistemas de reciclaje de plástico y puede degradarse naturalmente, minimizando así su impacto ambiental.

Además, el material utilizado en estas botellas ayuda a preservar el sabor y la efervescencia de la cerveza, mientras que su diseño externo contribuye a mantenerla fría por más tiempo, en comparación con latas o botellas de vidrio.

El lanzamiento de las botellas de papel de Absolut Vodka en tiendas selectas de Tesco en Manchester, Reino Unido, marca un hito significativo en el camino hacia una industria de bebidas más sostenible. La elección de Manchester como sitio de prueba se debe a su infraestructura de reciclaje avanzada y a las altas tasas de reciclaje doméstico en la región. Este enfoque estratégico permite a Absolut evaluar el impacto ambiental de sus nuevas botellas y recopilar comentarios de consumidores, minoristas y distribuidores para realizar los ajustes necesarios.

Embalaje responsable

Aunque el vidrio es una opción de embalaje preferible en términos de reciclabilidad y reutilización, su proceso de reciclaje es costoso en términos de energía y puede contribuir a la contaminación. La transición hacia botellas de papel podría tener un impacto significativo en las emisiones asociadas con la industria alimentaria y de bebidas.

Si bien Absolut Vodka es solo una de las muchas compañías de alcohol que están explorando alternativas más sostenibles, su iniciativa podría inspirar a otros a seguir su ejemplo.

La transición de Absolut Vodka hacia botellas de papel marca un paso importante hacia un futuro más sostenible para la industria de las bebidas alcohólicas. Esta medida no solo refleja el compromiso de la empresa con la responsabilidad ambiental, sino que también demuestra su capacidad para innovar y liderar el cambio en su sector.

Con el apoyo de colaboradores como Paboco y una creciente conciencia ambiental por parte de los consumidores, es probable que veamos más avances hacia soluciones de embalaje más sostenibles en un futuro cercano.