El control de plagas en las empresas del sector alimentario, bien sea en la industria alimentaria, bien en almacenes o establecimientos que vendan productos alimenticios envasados o servidos en la mesa, resulta de gran importancia.

Los vectores (insectos o roedores) que pueden contaminar cualquiera de las instalaciones en las que se procesan y almacenan alimentos causan mucho más daño que el de la destrucción de materia prima, dado que a través de su piel y de sus detritos son portadores de enfermedades.

Control de plagas y enfermedades asociadas

El control de las posibles plagas que puedan afectar a alimentos (roedores, moscas, cucarachas, …) se basa en la prevención mediante una escrupulosa higiene que haga poco apto y de difícil acceso para estos vectores de enfermedades los lugares o instalaciones en los que haya cualquier tipo de alimento, junto con la rápida actuación en caso de detectarse, aunque sea tan solo un ejemplar de alguna de las especies consideradas como plagas.

Las revisiones periódicas y los tratamientos adecuados, como la fumigación de plagas pueden suponer un trastorno para una planta industrial o un negocio de hostelería, somos conscientes.

Pero es preferible parar una línea de producción o cerrar un establecimiento durante unas horas o un día a correr el riesgo de propagar enfermedades como la salmonella, la toxoplasmosis, la listeriosis, la leptospirosis o contaminaciones por E. coli, que también pueden ser serias.

Por no hablar de que, cuando en un establecimiento o en una planta industrial se detecta la presencia de una plaga, si la información trasciende, la empresa perderá prestigio que le va a costar tiempo recuperar.

Poca gente es capaz de acudir tranquila a un restaurante, por poner un ejemplo, que haya sido noticia por ser el foco de transmisión de alguna de las enfermedades antes citadas.

Control de plagas en alimentos

Si eres responsable de la seguridad e higiene de una empresa o planta industrial en la que se manipulen, almacenen o procesen alimentos, vas a necesitar tener a mano los nombres de al menos una empresa especializada en el control de plagas en alimentos cercana a las instalaciones por las que respondes, y que sea una empresa eficaz.

La rapidez y discreción son otros valores que se agradecen, pero lo primero son eficacia y rapidez de actuación.

Los métodos empleados para el control de plagas en alimentos difieren en función de la empresa causante, y mientras algunos pueden obligar a una limpieza posterior, otros podrían ser menos restrictivos para continuar trabajando, ya sin temor, en un entorno en el que se manejan alimentos.

Si bien la higiene y la optimización del diseño de los almacenes de alimentos son muy importantes para reducir la probabilidad de sufrir la invasión de una plaga, ninguna empresa del sector alimentario está libre por completo y se impone la tolerancia cero con este tipo de problemas por las consecuencias que tiene para la empresa (coste económico y pérdida de reputación) y de los clientes (enfermedades más o menos serias).

Las revisiones periódicas marcadas por la Inspección de Sanidad sin duda incluirán el control de nuestro plan y su efectividad, por ello te aconsejamos que te informes sobre qué empresas de tu zona son las más adecuadas en el manejo y control de plagas por si, pese a tomar todas las precauciones posibles, pasara lo que nadie desea.

Fuente: traza.net